Consejos para cruzar Malawi en bicicleta.
El recuerdo que te queda de un país va siempre muy relacionado con la gente que conoces en tus experiencias. En Malawi he encontrado una amabilidad y una hospitalidad inacabables. El que su gente sea un poco tímida te permite además tener tu espacio y observar lo que encentras con tranquilidad. Aun así, como en el resto de países en África por los que he pasado hasta ahora, nunca te librarás de las millones de miradas que te rodean, esta vez más frecuentes al ser este un país con una densidad de población destacable. Todo lo demás en Malawi queda definido por su enorme lago. Recorrerlo en bicicleta de punta a punta por su costa hace que travesar este país sea una aventura mucho más relajada y agradable que la mayoría de las experiencias en África sobre la bicicleta.
Mejor época para cruzar el país
No creo que exista ningún problema en cruzar el país en cualquier época del año. Las temperaturas parecen ser muy moderadas si nos mantenemos cerca del lago y la época seca no nos evitará nunca el fácil acceso al agua potable.
Gente
La gente en Malawi siempre parece estar encantada de recibir turistas. Viajando en bicicleta he recibido miles de saludos, ánimos y sonrisas, muchas de las cuales (y las más efusivas) por parte de niños y niñas; da incluso la sensación de que éstos últimos están esperando a que llegues para aparecer de cualquier arbusto y gritar “Azungu!” (escrito como suena), avisando al resto de la presencia de un blanco en su territorio. A diferencia de los zambianos, la gente en Malawi parece más tímida. A veces da la sensación, sobretodo con la mujeres, de que tienen algo de miedo a los blancos y muchos se muestran distantes y reacios a una conversación. Como digo, se trata solo de timidez y no significa que vayas a ser mal recibido.
Animales
El safari en Malawi no parece ser tan común como en Sudáfrica, Botsuana y Zambia. Parecen tener varios parques naturales (en la que la bici tiene prohibida la entrada) y la existencia en ellos de animales salvajes parece abundante y diversa. Yo tuve la suerte de poder ver una pareja de elefantes en la ruta que me llevaba de Kasungu a Nkhotakota cruzando por camino de tierra un parque natural. Fuera de los típicos animales que esperamos encontrarnos en África podemos conformarnos con la gran cantidad y variedad de peces que se encuentran en el lago, acaben o no siendo parte de nuestra dieta.
Agua
Una tercera parte de la superficie de Malawi la forma un lago inmenso que se estira de norte a sur. Así, si no nos alejamos mucho de su perímetro no tendremos en ningún problema con poder acceder a agua potable de los abundantes pozos distribuidos por el país. Durante toda la ruta he llevado siempre menos de 3 litros en mi bicicleta. Cada vez que me quedaba sin agua me acercaba a un pozo y nunca tuve que parar ningún coche para reabastecerme. Los llamados ICE-POP que encontré por primera vez en Botsuana me han venido siguiendo todo el camino. En Malawi los encontraréis por todos lados, siempre en alguna tienda con congelador o guardados en neveritas de camping.
Carreteras
La calidad de la carretera en Malawi es buena. Nunca encontraremos grandes baches en medio de la carretera que nos puedan sorprender. Aunque no pueden compararse con las de Botsuana o Sudáfrica por ser un poco más pedregosas, nunca os veréis obligados a bajar de la bicicleta como pasa en algunas partes de Zambia.
Comida
Malawi es uno de los países más pobres del mundo. Causa y consecuencia de ello es la escasa producción en el país. Como tampoco la importación de productos funciona demasiado bien, la gente aquí vive siempre de los cultivos propios y de la compra-venta de alimentos a nivel local. Raras veces encontraremos un supermercado con variedad, pero siempre podremos comer de lo que nos ofrecen en el camino (normalmente basado en alimentos derivados del maíz pasados por aceite hirviendo). Quizás acabemos saliendo de Malawi con algo más de colesterol del que llevábamos encima, pero seguro que nunca nos faltaran calorías para seguir pedaleando!